a nivel mundial, más del 25% de las personas se ven afectadas por trastornos de ansiedad y depresión que provocan estrés biológico. Este es un tema complejo que cubriremos con más detalle en publicaciones futuras, pero para resumir, el estrés generalmente desencadena una respuesta de lucha o huida, lo que provoca la producción de hormona liberadora de corticotropina y catecolaminas en varias partes del cuerpo, que en última instancia perturba la microbiota.
En ausencia de estrés, una microbiota sana produce ácidos grasos de cadena corta que ejercen efectos antiinflamatorios y antitumorales. (5)
Los niveles elevados de estrés pueden ir acompañados de una inflamación crónica que puede contribuir al desarrollo de enfermedades relacionadas con el sistema inmunitario como la artritis, la fibromialgia, el lupus, la psoriasis y la enfermedad inflamatoria intestinal.